Perspectiva Internacional

América Latina ante su gran oportunidad, una revolución tecnológica inspirada en la naturaleza

Por Perspectiva Internacional
3 de junio de 2025

America latina y caribe ante una encrucijada historica

América Latina y el Caribe (ALC) se encuentran ante una encrucijada histórica. En un mundo que avanza hacia nuevas fronteras tecnológicas y busca modelos de desarrollo sostenibles, la región más biodiversa del planeta podría dejar atrás su rol tradicional de proveedor de materias primas para convertirse en protagonista de una revolución científica e industrial inspirada en la naturaleza.

El futuro tecnologico podria construirse desde lagos, bosques y arrecifes

Durante décadas, el dilema entre crecimiento económico y conservación ambiental ha limitado las posibilidades de desarrollo para los países latinoamericanos. Sin embargo, este falso antagonismo empieza a ser cuestionado por voces que señalan una alternativa poderosa: usar la biodiversidad no como un recurso a extraer, sino como un motor de innovación. Desde la biomímesis hasta la bioeconomía, el futuro tecnológico podría construirse desde los bosques, ríos y arrecifes de la región.

Desarrollar una idea que no es nueva

La idea no es nueva. La naturaleza ha sido fuente de inspiración para avances como las turbinas eólicas basadas en aletas de ballena o medicamentos derivados de plantas tropicales. Lo que está en juego ahora es si América Latina podrá capitalizar su riqueza biológica para convertirse en creadora de valor y no simplemente en fuente de insumos para industrias extranjeras. Hoy, mientras las innovaciones bioinspiradas florecen en los laboratorios del norte global, en América Latina el potencial sigue infrautilizado. Peor aún, muchos descubrimientos acaban convertidos en casos de biopiratería.

El financiamiento gran escollo

Uno de los principales obstáculos es el financiamiento. La región invierte apenas el 0,6% de su PIB en investigación y desarrollo, muy por debajo del promedio mundial. Sin inversión sostenida y estrategias de largo plazo, difícilmente se podrá construir una base científica sólida capaz de generar tecnologías propias. Además, persisten problemas estructurales como la fuga de cerebros, la fragmentación de políticas públicas y la escasa integración entre ciencia, industria y comunidades locales.

No solo proteger la biodiversidad

No basta con proteger la biodiversidad —aunque la región ya lidera en áreas naturales protegidas—. Hace falta un nuevo paradigma: políticas industriales orientadas a la bioinnovación, una educación científica conectada con los desafíos ecológicos, y financiamiento inteligente que promueva el desarrollo productivo sin comprometer los ecosistemas ni los derechos indígenas.

El desafio transformar el modelo economico

Algunos esfuerzos ya están en marcha. Iniciativas como las del centro TIDE y el banco CAF buscan sentar las bases para una economía del conocimiento enraizada en los territorios. Pero aún falta ambición política. Los gobiernos deben poner la biodiversidad en el centro de sus agendas industriales y tecnológicas. No se trata de volver al extractivismo con otro nombre, sino de transformar el modelo económico desde su raíz.

La inteligencia de la naturaleza es clave

Carlota Pérez, académica de referencia en innovación, ha defendido por años que los países latinoamericanos deben aprovechar sus ventajas naturales para construir capacidades tecnológicas. Ese momento ha llegado. En una era de transición energética, crisis climática e inteligencia artificial, la inteligencia de la naturaleza podría ser la clave para un desarrollo verdaderamente sostenible.

La pregunta ya no es si América Latina tiene potencial para liderar la próxima revolución tecnológica. La pregunta es si se atreverá a hacerlo.