la estrategia de Viktor Orbán que inquieta a la OTAN
La relación de Viktor Orbán con Rusia y China está generando crecientes tensiones en el seno de la OTAN y la Unión Europea. Mientras Budapest insiste en que sus acuerdos con Moscú y Pekín son una cuestión de “soberanía”, los aliados occidentales interpretan esta postura como un desafío que amenaza la unidad y la seguridad regional.
Neutralidad economica
Orbán ha bautizado su estrategia como “neutralidad económica”, un término que busca justificar sus lazos comerciales tanto con Occidente como con regímenes autoritarios. Recientemente, embajadores de países miembros de la OTAN en Budapest se reunieron, a iniciativa del representante de EE.UU., David Pressman, para analizar las “implicaciones de seguridad” de esta política. La preocupación es que Hungría, con una política cada vez más alineada con Rusia y China, pueda debilitar la posición de la alianza frente a amenazas como la guerra en Ucrania y la creciente influencia china. Ahora habra nuevas definiciones una vez que se sepa la posicion de Donald Trump.
Especulaciones por la cercania de Hungria y Rusia
Las autoridades húngaras han respondido a las críticas con mensajes de desafío. El jefe de Gabinete de Orbán sugirió que EE.UU. debería enfocarse en su propio comercio con China antes de criticar a Hungría. Asimismo, el ministro de Exteriores húngaro, Péter Szijjártó, se ha reunido en múltiples ocasiones con su homólogo ruso, lo que ha generado especulaciones sobre la proximidad de Hungría a la línea de Moscú.
Graves dificultades financieras
La política de “neutralidad económica” ha llegado en un momento en que Hungría enfrenta graves dificultades financieras, con 21.000 millones de euros en fondos de la UE congelados y una creciente dependencia de las inversiones chinas, especialmente en sectores estratégicos como el de vehículos eléctricos. Esta dependencia económica preocupa a expertos como Zsuzsanna Végh, quien ve esta relación como una amenaza para la competitividad de Europa y una potencial fuente de espionaje chino en la región.
La relcion de Orban y Trump
Orbán, que se autoproclama defensor de la paz en Ucrania, también ha cultivado su relación con Donald Trump, antes que este fuera electo presidente de Estados Unidos. Orban supone que el triunfo de Trump refuerza su posicion.
La estrategia de Orbán, lejos de consolidar a Hungría como un actor neutral, ha hecho que sus socios europeos y atlánticos lo perciban cada vez más como un elemento desestabilizador. La paciencia de la OTAN y la UE se agota ante la insistencia de Orbán en acercarse a regímenes autoritarios, y la posibilidad de aislar a Hungría dentro de las instituciones occidentales se vuelve cada vez más real. La posicion de Trump frente a OTAN, sera decisiva para la evolucion del vinculo de Hungria y la OTAN.
